Tecnologías emergentes en la gestión de flotas
La gestión de flotas se puede beneficiar de aspectos como la inteligencia artificial y el Internet de las Cosas. Conoce de qué manera.
La gestión de flotas es una actividad dinámica en muchos sentidos; como administrador de vehículos es vital estar monitoreando constantemente las rutas; además, que el mercado se muestra activo, adoptando constantemente nuevas tecnologías que ayudan a optimizar las operaciones, un aspecto que es necesario evaluar con cierta frecuencia para ir mejorando la competitividad y aportar valor adicional a los clientes.
En esta línea, la encuesta “The Transportation Leaders Survey: A Road to AI Adoption (2024, por Penske)” identificó que los principales desafíos que enfrentan los líderes del sector del transporte y la logística son: los crecientes costos (60%) y las interrupciones en la cadena de suministro (36%). Los cuales pueden enfrentarse con tecnologías como Internet de las Cosas (IoT) e inteligente artificial (IA).
Las nuevas tecnologías de la gestión de flotas
En un entorno cada vez más globalizado y conectado, con clientes exigentes y un rápido avance de la tecnología, las necesidades exigen soluciones cada vez más complejas, entonces es preciso estar a la altura con herramientas que aceleren la innovación y mejoren aspectos como la seguridad y la satisfacción de los clientes. En este escenario es donde te puedes apoyar en IA e IoT.
¿Qué es la IA y el IoT?
La IA es un campo de la informática enfocado en la creación de sistemas, que tiene el objetivo de que máquinas desarrollen las mismas capacidades que tienen los seres humanos, ya sean tareas sencillas o complejas, pero de una forma más rápida y precisa.
Por su parte, el Internet de las Cosas (IoT) es una red de máquinas que intercambian datos entre sí mediante una conectividad avanzada.
Ambos elementos llevan al mínimo la intervención humana, propiciando que las personas puedan enfocarse en otras áreas para alcanzar una mayor productividad y se beneficien de información procesada para optimizar sus operaciones.
¿Cuál es su utilidad en la gestión de flotas?
Cuando se une la IA con IoT en un mismo entorno o plataforma para servir en la gestión de flotas, el resultado es muy ventajoso, pues transforma la movilidad, integrando la recopilación y análisis de datos, la automatización de tareas y otras funciones que facilitan la toma de decisiones. Conoce su potencial a continuación.
IoT y la recopilación de datos
Una solución de gestión de flotas inteligente se caracteriza por incorporar GPS y algunos sensores, como de velocidad, de temperatura y humedad. Dichos equipos cumplen una determinada función.
Al contar con una plataforma en línea y conectada con los vehículos por satélite, es posible ver en todo momento su ubicación y de allí detectar si las operaciones van en buen camino. En esta tarea, los sensores hacen su parte. Tener el control de la velocidad permite crear alertas si algún conductor realiza frenadas bruscas y notifica automáticamente al encargado.
También, el sensor de temperatura y humedad garantiza que la cadena de frío de un camión, por ejemplo, se cumpla desde que sale del punto de distribución hasta que llega a cliente, por lo que se tiene un control centralizado de toda la cadena.
La IA en el análisis de datos avanzado
La inteligencia artificial es capaz de analizar grandes datos y encontrar patrones de forma rápida, una tarea que le podría llevar días a un equipo de personas. Por ejemplo, con toda la data que recopilar los dispositivos IoT, se podría encontrar insights valiosos como mejores rutas, identificar conductores con prácticas peligrosas, calcular el potencial ahorro de combustible y mucho más.
También, facilita la programación de mantenimientos predictivos, lo cual propicia que las unidades de la flota tengan una menor probabilidad de sufrir averías, disminuyendo las interrupciones en la cadena de suministro mientras se evitan costos inesperados.
De este modo, una gestión de flotas que integra estas tecnologías, puede hacerle frente a los principales desafíos que enfrenta la industria del transporte: la constante alza de los costos y las interrupciones de la cadena de suministro.