La cleantech chilena Atando Cabos, que se dedica a limpiar los mares de la Patagonia usando el plástico como materia prima para crear nuevos productos, está lanzando una iniciativa junto a BASF, cuyo objetivo principal es crear un portafolio innovador de productos de plástico 100% reciclado de alta gama, como los drenes utilizados en construcciones civiles.
Se estima que sólo en la Patagonia hay cerca de 200 a 300 mil toneladas de plásticos derivados de redes, cuerdas y boyas que terminan en playas, islas y fiordos del sur de Chile. Además, se calcula que cada año se agregan más de 8 mil toneladas adicionales.
Con la mirada puesta en la restauración y protección del ecosistema, Atando Cabos, que nació en 2015 como un proyecto al alero de Comberplast -compañía con más de 25 años de experiencia en el reciclaje de plásticos-, se enfoca en el desarrollo de soluciones para evitar que el plástico se considere un desecho y contamine el medio ambiente, generando usos alternativos y de alto valor.
Según destaca su cofundador, Michel Compagnon, hoy ésta cleantech, -establecida como empresa independiente desde 2019-, encontró la forma de limpiar el mundo de desechos plástico, asegurando que estos residuos nunca más volverán al medioambiente, pues los transforman en productos hechos con material reciclado y denominación de origen.
Desafíos para el desarrollo de tecnologías avanzadas
“El primer desafío fue trasladar cerca de 20 toneladas de cabos y redes en un camión desde la Patagonia hasta nuestra planta en Santiago, donde se procesan para generar estos nuevos materiales”, cuenta Compagnon.
Otra de las principales dificultades a enfrentar fue que los polímeros reciclados presentaban problemas de calidad y rendimiento, debido a impurezas y contaminantes que cambiaban sus propiedades. Dado esto, para lograr la resistencia que buscaban, contactaron a BASF, empresa química alemana líder en innovación, con quienes comenzaron a desarrollar un trabajo conjunto para testear aditivos, es decir, sustancias que mejoraran las características del plástico reciclado.
Con el uso de productos IrgaCycleTM, consiguieron mantener las propiedades mecánicas requeridas, minimizando al máximo las deficiencias de calidad de los polímeros que surgen de la tensión térmica y mecánica.
Fabricio Soto, Director del equipo de Performance Chemicals de BASF, explica que “la calidad de los plásticos reciclados es clave, porque los residuos tienen complejidades que nadie se había atrevido a enfrentar. Como BASF, tomamos el desafío y ya estamos haciendo productos de alta calidad, con soluciones innovadoras que están habilitando nuevas posibilidades para nuestros clientes en la industria del reciclaje”.
“Hemos trabajado codo a codo con Comberplast y Atando Cabos, para ayudarlos a desarrollar un negocio basado en la economía circular. No ha sido una tarea fácil, ya que requiere de creatividad, pasión, colaboración y comunicación continua por parte de todos los actores”, agrega.
Gracias a la articulación entre ambas organizaciones, Atando Cabos ha creado un portafolio innovador de productos de primer nivel fabricados con plástico reciclado, como por ejemplo, drenes de plástico 100% reciclado utilizados como sistemas de drenaje de agua en construcciones civiles, es decir, para capturar y drenar el agua de la lluvia, soportando presiones de hasta 42 toneladas por metro cuadrado.
A la fecha, el proyecto lleva más de 2.500 toneladas recicladas al año y ha emitido 3,26 veces menos de CO2 con la fabricación usando su material, en comparación con el uso de plástico virgen. Como parte de su visión de mejora continua, Atando Cabos desarrolló una tecnología que permite trazar el impacto positivo en todo el ciclo: desde el lugar donde se recolectó hasta el producto final, permitiendo identificar el origen exacto de cada desecho plástico.
“Las soluciones que BASF nos ha proporcionado por medio de sus aditivos, generan una enorme contribución a toda nuestra cadena de valor, ayudando a consolidar la economía circular de los plásticos y a abordar la creciente demanda de resinas recicladas”, finaliza Compagnon.
