Partió la temporada: lo que hay que saber para el buen uso de las piscinas en los condominios

Si bien cada comunidad tiene sus reglas para la utilización de este espacio, también hay que seguir una serie de normas sanitarias.

Se acerca el verano y, aunque las condiciones climáticas aún no se han equilibrado, claramente las altas temperaturas ya se hacen sentir y la temporada de piscinas ya comenzó, lo que incluye a los condominios.

Es por eso que el software de administración de edificios y condominios Comunidad Feliz explica todo lo que hay que saber sobre el funcionamiento de estos cotizados espacios. “En el corazón de los condominios en Chile, entre las imponentes estructuras y jardines bien cuidados, se encuentra un espacio que ha llegado a representar un oasis de esparcimiento y relajación: las piscinas. Estos enclaves acuáticos no solo ofrecen un refugio al calor, sino que también desempeñan un papel fundamental en la vida de quienes han elegido u optado por la vida en comunidad”, explica Valeria Morillo, Encargada de Contenidos y vocera de Comunidad Feliz. 

Esto, porque las piscinas en los condominios no son simplemente áreas de entretenimiento, sino que son un reflejo de la calidad de vida que los residentes buscan y valoran dentro de sus instalaciones en la época más calurosa del año.

Las piscinas en los condominios tienen un tratamiento especial regulado por el decreto N.º 209 del Ministerio de Salud, que aprueba el reglamento de piscinas de uso público. Este contempla una serie de exigencias preventivas, legales y técnicas a las administraciones, para el óptimo y correcto funcionamiento de las piscinas en pro de todos sus usuarios”, agrega Valeria.

Cabe destacar que las piscinas en los condominios son de uso exclusivo de sus residentes, pese tener una denominación de uso público. De todas maneras, la ley -dentro de la regulación del mismo decreto- las ha clasificado dentro de una categoría especial denominada: Piscinas de uso público restringido.

¿Cómo se mantienen las piscinas? 

Según lo expresado por Comunidad Feliz, el mantenimiento de las piscinas debe realizarse por una empresa especializada en este servicio, dado que se deben controlar los químicos que se le aplican al agua para mantenerla segura para las personas y cumpliendo con las normativas de la SEREMI.

De hecho, en la temporada de apertura de piscinas de hacen fiscalización aleatorias, así que la comunidad siempre debe tenerla en perfecto estado.

¿Suben los gastos comunes?

Valeria Morillo afirma que efectivamente suben los gastos comunes en este periodo del año. “Siempre suben, así como sube el agua caliente en invierno. Así, en esta época sube el valor de los gastos comunes, debido al aumento en mantenimientos de piscinas, que se hace entre una o dos veces a la semana”.

En ese sentido, y según un estudio realizado por Comunidad Feliz, las comunidades en promedio estarán gastando entre $100.000 a $200.000 sólo en mantención de piscinas, que se divide entre todos los residentes en el cobro del gasto común.

Recomendaciones

  • Comunicar y preparar a la comunidad de todos los lineamientos y normas para la apertura de piscinas, así como informar un posible aumento en los gastos comunes.
  • Cumplir con lo relacionado a las piscinas que se regule en el reglamento de copropiedad del edificio
  • Si bien no ese está llevando aforo, mantener un control de la cantidad de personas que pueden usar la piscina al mismo tiempo, para garantizar el disfrute de los residentes 
  • Supervisar de vez en cuando los mantenimientos de la piscina para asegurarse de un trabajo bien hecho.

¿Qué hacer en casos de emergencia?

Si bien el artículo 66 del decreto N.°209 permite el funcionamiento de las piscinas de uso público restringido sin necesidad de las salas de primeros auxilios, sí establece una serie de indicaciones que las administraciones de los condominios deben seguir ante la eventualidad de algún usuario accidentado: 

  • Debe existir un teléfono en las cercanías de la administración y en un lugar visible una lista con los números telefónicos de urgencia a los cuales se estime sea conveniente recurrir en caso de accidentes graves.
  • Es recomendable mantener permanentemente -durante las horas de funcionamiento de la piscina- un vehículo disponible en forma exclusiva para la obtención de atención médica de emergencia.
  • Los casos de accidentes graves deberán ser notificados a las autoridades sanitarias locales antes de 24 horas. La autoridad sanitaria deberá realizar una investigación del accidente, a fin de tomar las medidas correctivas que corresponda, e iniciar un sumario sanitario, si la situación lo amerita.

“Es importante mencionar que, en caso de haber algún usuario o bañista accidentado al cual se le tenga que aplicar técnicas de primeros auxilios o ayuda médica, deberá de anotarse en el libro del registro de piscinas, anteriormente indicado”, finaliza Valeria Morillo.

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