Review| Xiaomi Pad 6: un combo entretención-productividad que incluso puede tentar a los no amantes de las tablets
Al inicio, las tablets surgieron casi exclusivamente como una opción multimedia. O lo que es lo mismo: ver el contenido en un dispositivo que su gran plus es tener una pantalla más grande que el smartphone. Ni más, ni menos. Y el tiempo fue pasando y parecía que el formato caía en decadencia, casi al destino de padres con hijos inquietos a los cuales entretener con Paw Patrol. Pero en los últimos años hubo un cierto repunte.
Hoy, con la nueva camada de tablets, casi que se les juzga primero como notebooks de entretención, y después como dispositivos multimedia. En parte es injusto, y en parte tiene sentido.
Pudimos probar la última tablet de Xiaomi, la Pad 6, y aquí te contamos nuestra evaluación en cuanto a pantalla, potencia, diseño y funcionalidades. Desde ya, te adelantamos que el sabor de boca tras dos semanas de uso es más que bueno.
Lo primero es siempre poner en contexto a un dispositivo en relación a su precio. En este caso, parte en los $359.990 en la página oficial, y llega hasta los $479.990 en el pack que incluye el smart pen de segunda generación y su funda magnética.
Es decir, se sitúa al medio en comparación a las opciones más caras como las de Samsung y Apple, y las opciones de entrada que rondan los 200 mil. Si voy a gastar 800 lucas en una tablet, le pido magia y apartados sobresalientes, si voy a comprar algo lo más barato posible, pido que sea cumplidor, y si voy a gastar poco menos de medio millón, la oferta debe ser sólida. Bajo esa premisa, la oferta se cumple holgadamente.
Características
¿Causa una buena primera impresión el Xiaomi Pad 6? Sí. Su estructura es de una sola pieza metálica y cantos rectos, lo que se agradece bastante (personalmente) para el agarre. El módulo de la cámara sobresale, sí, aunque ya es lo habitual en todos los dispositivos. A eso sumamos que las fundas magnéticas vienen especialmente diseñadas para cubrir las cámaras y evitar rayones.
Al tomar la tablet, resalta su poco peso -que no alcanza el medio kilo (490 gramos)- y delgadez (6,5mm). La maniobrabilidad es más que decente y para mí, que no soy usuario regular de tablets, no fue un tema mayor la adaptación a tomarlo en las manos. Lo más interesante, sin embargo, es que el acabado metálico de una pieza, con cantos rectos, ofrece una apariencia y tacto de producto premium.
La pantalla es lo que es. Un muy buen panel para ser un LCD de 11 pulgadas y con una tasa de refresco de 144Hz. No llegan al nivel de las Amoled de un gama alta con su contraste y brillo, pero tampoco se podría decir que empaña el hecho de disfrutar contenido multimedia, ya sea videos, fotografía o juegos. Difícilmente por el precio se podría exigir algo mejor.
En cuanto a batería son buenas noticias. Sus 8.840 mAh son garantía de que un usuario no tan intensivo podrá usarla dos o tres días sin grandes inconvenientes, y si eres un jugador intensivo, debería soportar muy bien el día de uso. En esta experiencia se usó para un aproximado de una hora de juegos, tres horas de videos por día y varias horas de uso en pantalla para uso de correo, videollamadas y navegación. ¿El resultado? nunca llegué al 60% de la batería diario. Por cierto, posee carga rápida de 33W.
El dispositivo posee una conexión por cable (USB-C 3.2 Gen 1), Wifi 6 y Bluetooth 5.2. No cuenta con puerto de audífonos -como casi todo dispositivo a estas alturas-, lo que es casi el estándar por estos días pero bien vale la pena mencionarlo. Y en cuanto a potencia, la Pad 6 luce un procesador Qualcomm Snapdragon 870, que tranquilamente permite jugar juegos demandantes sin tirones y que la multitarea sea una experiencia positiva.
Experiencia de uso
Como no usuario de tablets, mi enfoque fue entrañar si la Pad 6 de Xiaomi conseguía de algún modo ganar un espacio en dos tareas: el consumo multimedia de videos y podcast, además de tareas para el trabajo.
Aquí una primera clave. Usé la tablet tanto con los accesorios del Smart Pen y la funda magnética con teclado. Al lápiz no logré sacar provecho, probablemente porque no soy de utilizar herramientas de diseño y edición. El implemento que sí aproveché fue el teclado con funda.
¿Está en condiciones una tablet de reemplazar por completo a un computador? La respuesta, en corto, es no. Pero ojo, en el caso de mi trabajo, que involucra navegación web, uso intensivo del correo y la suite de Google, incluidos Meet, Calendar, Docs y poco más, es perfectamente posible pasar jornadas completas en la tablet sin cambiarte al PC.
Eso sí, uno de los “detalles” que podemos encontrar en la tablet es su software y capa del sistema operativo. Se defiende, sí, pero no se aprecia el nivel de detalles pulidos para el formato como en fabricantes de gamas más altas. Pero de nuevo, nada que empañe la experiencia.
Al usar la Pad 6 con el teclado y conectar un mouse por Bluetooth, a veces olvidaba que lo que tenía al frente no era un PC. Es más, podría decir que la experiencia de cambiar de apps y multitarea entrega una experiencia notoriamente más fluida que usar el computador.
Los juegos que se pudieron probar fueron Genshin Impact, Asphalt 9 y Tennis Clash. Todos ellos funcionaban sin tirones, a una tasa de hertz muy disfrutable y sin grandes episodios de calentamiento del dispositivo.
En cuanto a sus parlantes con Dolby Atmos, funcionan tan bien como se puede esperar del sonido en una tablet: un sonido mucho más contundente y no tan chillón como ocurría hacer años atrás, pero sin tantos graves presentes. Eso sí, el efecto estéreo se nota.
Una tablet como la Pad 6 hace que consumir contenido multimedia valga la pena. En general, más allá de uno que otro video en YouTube, no soy de usar el smartphone para ver series, pero debo decir que sí disfruté la tablet con el combo de panel y audífonos inalámbricos.
Por último, en cuanto a cámaras, la Pad 6 posee una cámara frontal de 8 megapíxeles en que el uso que más sentido me hace es el de aprovechar la tablet para tomar videollamadas. Selfies también, claro, pero las cámaras de una tablet son lo que son: un complemento que está porque debería estar, pero que no llegan al nivel de los smartphone de gama media hacia arriba.
Eso no quita que la performance de la cámara frontal sea “resultona”. En videollamadas destaca por captar buena luz y definición, en cualquier caso mucho mejores que las webcam incluidas en los notebook, y con una capa de suavizado en el rostro que te juega a favor pese a que tu rostro no esté en el mejor día. Eso sí, en un momento intenté quitar ese efecto y para mi sorpresa, al dejarlo al mínimo, seguía sintiendo que la capa seguía allí.
La cámara principal, de 13 megapíxeles, está un peldaño más arriba que otras cámaras posteriores de tablets que he probado. En entornos iluminados consigue muy buenos resultados, con fotos que apuestan por sonidos vibrantes y con un procesado que maneja de buena manera el HDR. Y al disparar en el modo nocturno, sí podríamos decir que no es una experiencia de alta gama, pero que sin embargo capta bien la luz y no “amarillea” los escenarios en exceso.
A continuación, dos ejemplos del mismo escenario a plena luz del día y en la noche.
¿Nuestras conclusiones? Si bien un notebook sigue siendo crucial para utilizar ciertos programas, el combo de entretenimiento y productividad de la Pad 6 podría seducir a más de alguno que se plantea una tablet como apoyo a sus tareas del trabajo. Pero ojo, al criterio de Entreprenerd, el accesorio del teclado y funda magnética es esencial para que la experiencia sea disfrutable. Se trata del complemento ideal para utilizar el correo, la navegación web y la suite de Google, por dar ejemplos.
Por el precio, parece una compra más que válida, incluso para aquellas personas que aún no le dan una oportunidad a las tablets.