Confianza y salud dental: la apuesta de una startup nacional para transformar sonrisas femeninas
No se trata de sonreírle a esa persona que ha estado ahí desde siempre, sino que sean ellas las que lo hagan sin inseguridades. ¿Cómo? La startup nacional WIZZ, especializada en ortodoncia invisible, propone lo que puede ser una novedosa opción.

El Día de la Madre es una oportunidad para celebrar el amor que transforma, el cuidado silencioso y la entrega incondicional de mamá. Hay madres, tías, abuelas, madrinas o cuidadoras que, aunque tienen motivos de sobra para sonreír, no siempre pueden expresarlo como quisieran.
"La sonrisa no solo es una expresión de felicidad, sino también un reflejo de bienestar emocional, confianza y alegría. Estudios han demostrado que sonreír libera endorfinas, serotonina y dopamina, neurotransmisores que generan sensaciones de placer y reducen el estrés. Además, una sonrisa sincera fortalece la autoestima, mejora la conexión social y puede transformar el estado de ánimo tanto propio como de quienes nos rodean", explican desde Wizz.
Sonreír sin inseguridades cambia la vida
Recuperar la libertad de sonreír tiene un impacto profundo a nivel psicológico. Según investigaciones en psicología positiva, las personas que sonríen con seguridad tienden a mostrarse más empáticas, optimistas y resilientes. Esto no solo mejora su salud mental, sino también su capacidad para enfrentar desafíos y cuidar de los demás —una labor que muchas madres realizan a diario, a veces en silencio.
Así, la ciencia respalda los beneficios de la sonrisa. Según un estudio epidemiológico realizado por investigadores de la Universidad Estatal de Wayne (EEUU) y publicado en la revista Psychological Science Online First el año 2023, aquellas personas que sonríen más a menudo viven entre cuatro y cinco años más que aquellas que no lo hacen tanto.

Y si hay alguien que conoce de resiliencia, es una madre. "La confianza al sonreír se vincula con menor ansiedad social, mayor autoestima y más participación en contextos sociales y laborales. Sentirse bien con la propia imagen puede ser el primer paso para dejar atrás inseguridades que han acompañado a muchas mujeres por años. Sonreír con libertad es, en esencia, una forma de reconectarse con una misma cada día", explica Ignacia Torres, ortodoncista de Wizz.
Testimonios reales que inspiran
Es el caso de Loreto I., una paciente chilena, cuenta cómo tras realizarse distintos tratamientos, ninguno de éstos funcionó, y cuando llegó a Wizz -con dudas y miedo- vio la diferencia entre los tratamientos dentales.
"Ningún otro tratamiento me funcionó, querían quitarme más dientes y cobrarme un montón de plata. Llegué a Wizz con un montón de dudas y miedos, ¡y lo que encontré me gustó! Me dejaron los dientes perfectos y no me cobraron nada adicional", sostuvo.
Otra paciente también señaló en su cuenta de TikTok: "Estoy impactada con el avance que llevo alineando mis dientes con el tratamiento que realizan en Wizz, en tan solo 2 meses y medio. Demasiado feliz con el proceso, fácil, rápido".
Estas historias reflejan una transformación que va mucho más allá de lo estético: son personas que hoy sonríen sin miedo, sin esconderse, con seguridad.
CÓMO FUNCIONAN LOS TRATAMIENTOS
Los alineadores invisibles actuales, como los desarrollados por la scale up chilena Wizz, están diseñados para corregir los siguientes casos:
● Apiñamiento dental (poco espacio que resulta en dientes superpuestos unos sobre otros).
● Giroversión (dientes girados sobre sí mismos).
● Diastemas (separación visible entre los dientes).
El proceso comienza con una cita gratuita de escaneo 3D, donde se capturan imágenes detalladas de los dientes del paciente. Estas imágenes son evaluadas por un equipo de ortodoncistas con el apoyo de su software de IA, determinando la viabilidad del tratamiento y su duración, manteniendo el criterio clínico del especialista en el centro de cada decisión. "Generalmente, los tratamientos tienen una duración de entre 4 y 8 meses, dependiendo de la complejidad del caso", explican desde Wizz.
Un regalo diferente
En este Día de la Madre, más que pensar en regalos, pensemos también en momentos que atesoraremos de por vida. Pensemos en estar ahí, en compartir una carcajada espontánea, en decir "te quiero" con los ojos, con los gestos, con una sonrisa.
"Porque cada madre merece sentirse bien con quien es, queridas, valoradas, y porque su sonrisa también merece cuidado", finalizan.